Cualquier persona que decida hacer una escapada a Colombia no puede dejar de visitar San Andrés, una isla paradisíaca en un entorno increíble.
Siempre tendré grabado en mis retinas antes de aterrizar en San Andrés las vistas desde el avión, se ve una pequeña isla rodeada de agua cristalina, el mar es tan azul que te hace daño mirarlo, y puedes observar la cantidad de colores que tienen sus aguas. La extensión de San Andrés son 26 Km. cuadrados.
San Andrés ha sufrido una sobre población y el gobierno de Colombia actualmente si quieres residir en la isla tendrías que casarte con alguien de la isla o supongo que llegar con un permiso de trabajo.
Cuando llegues a disfrutar de vuestra escapada a San Andrés lo mejor es alquilarte un coche pequeño similar a los que se utilizan en los campos de golf, en el entran cuatro personas y se puede recorrer la isla perfectamente. Si sois mas de cuatro creo que los hay mas grandes.
No puedes dejar de visitar islas muy pequeñitas como Johnny Cay y el Acuario. Lo mejor es negociar con alguien que tenga una barca y te acerque a ambas islas, antes de negociar exige chaleco y equipo de snorkel, hay mucha gente que se va a querer aprovechar, pero si lo miras con varios acabarás dando con el indicado en muy poco tiempo, déjale claro que quieres que este con vosotros todo el día, sino te pasara como a nosotros que nos quedamos tirados en el acuario, pero nos encanto quedarnos. Estos dos lugares son los más paradisíacos de toda la isla, la sensación de paz que sientes cuando te relajas un poquito en alguna de las islas es total. En la isla de acuario podrás bucear a escasos metros de las mantas incluso puedes tocarlas, pero si se te acerca alguien y te dicen que te cobran por enseñarte las matas o cualquier cosa ni caso, puedes hacerlo tu solo. En Johnny Cay encontraras muchas iguanas, si pides langosta en algún chiringuito, te enseñaran una langosta tremenda y luego a la hora de ponértela en el plato te ponen unas migajas con un poco de arroz es de risa, pero como estas tan bien, ni te importa.
Por la noche en San Andrés no hay mucha fiesta, nosotros estuvimos en dos discotecas una del hotel y otra en la calle, pedimos unas botellas y aunque era febrero y quizás no era la mejor época nos lo pasamos muy bien. A mi que me encantan los restaurantes con espectáculo, por mas que busque por la isla no encontré ni uno.
Una mala experiencia en nuestra escapada a San Andrés la tuvimos en la piscina del hotel. Uno de nosotros salto a la piscina y se hizo una brecha en la cabeza pasamos una noche en el hospital y nos cobraron casi 1000 €, para que el hotel asumiera los mil euros yo tuve que moverme por la isla y me comentaron que me fuera a una radio de la isla y que amenazara al director del hotel que sino nos abonaba ese importe lo dirías en la radio pública, a las dos horas nos abono el importe. Eso si habíamos contratado un seguro antes de viajar, por lo tanto si viajas a un país similar a este intenta hacerlo con un seguro de viaje para evitar posibles disgustos.
El último día de nuestra escapada por San Andrés comimos en un restaurante que tenia un embarcadero la entrada al restaurante estaba llena de botellas, es mas la decoración del exterior era con botellas, la comida no fue excesivamente cara y comimos muy muy bien. No puedo decir el nombre del restaurante porque no lo recuerdo.
Algo que me impacto realmente de la isla también fue cuando cogimos una barca y fueras en la dirección que fueras en todo el mar te cubría lo mismo y el agua era cristalina. No te cubría entero y el mar era increíble. Solo pasaba por mi cabeza, sino lo veo no lo creo…
Hasta aquí la escapada a San Andres, una isla paradisiaca en un entorno inolvidable.